Un potente ventarrón acompañado de lluvias azotó la provincia de La Vega, específicamente en Constanza, causando estragos en la zona. Decenas de árboles fueron derribados y postes del tendido eléctrico cayeron, mientras que las plantaciones agrícolas sufrieron daños significativos, especialmente en los cultivos de papa y cebolla. Los invernaderos de ajíes, tomates y pepinos también resultaron afectados, con varios de ellos destechados por la fuerza del viento.
A pesar de la magnitud del fenómeno, la Defensa Civil no recibió informes de personas heridas como consecuencia de las condiciones climáticas adversas. Sin embargo, los representantes de las asociaciones campesinas están llevando a cabo un levantamiento para evaluar los daños causados y determinar su alcance.
El impacto del ventarrón se extendió más allá de los campos agrícolas, afectando también la infraestructura vial. Árboles y postes derribados bloquearon varias carreteras en áreas como Portezuelo y Tireo, dificultando el tránsito vehicular en la región montañosa.
Ante la gravedad de la situación, las autoridades decidieron suspender las clases en Constanza como medida preventiva. El Ministerio de Educación emitió un comunicado en el que anunciaba la suspensión de la docencia para garantizar la seguridad de la comunidad educativa, comprometiéndose a mantenerla informada sobre cualquier actualización relacionada con la reapertura de actividades.