El Gobierno de Haití lamentó este viernes el «desafortunado incidente» ocurrido el pasado lunes en el puesto fronterizo ubicado entre Malpasse (del lado haitiano) y Jimaní (del dominicano) relativo a la retirada de la bandera de la República Dominicana.
«El Gobierno lamenta este malentendido, que tiende a perjudicar las relaciones amistosas entre los dos países. Aprovecha esta oportunidad para informar al público de que está abierta una investigación para determinar los autores y coautores de este acto», señala un comunicado de prensa.
La enseña dominicana, izada en un mástil en el límite del puesto fronterizo conocido como Terminal 252, ubicado en territorio dominicano, fue arriada por personas de nacionalidad haitiana en la jornada del lunes y, a continuación, se produjeron varios disparos.
La retirada de la bandera provocó la intervención de los soldados dominicanos del Cuerpo Especializado de Seguridad de Fronteras Terrestres (Cesfront) que respondieron con sus armas al ataque con piedras y botellas lanzadas por los haitianos.
«También se han hecho arreglos para izar las dos banderas en la Terminal 252 a fin de mantener la calma y la serenidad en la frontera haitiano-dominicana, Malpasse-Jimani», prosigue la nota.
El Gobierno de Haití, que toma nota del «desafortunado incidente», informó de que la cuestión de las banderas haitiana y dominicana en la Terminal 252 está acordado entre ambas naciones como resultado de las reuniones celebradas en enero y febrero de 2020, dice la nota de prensa.
En un esfuerzo por «normalizar la situación», las autoridades haitianas dicen que se había previsto una ceremonia especial en la que las banderas de ambos países se alzarían al mismo tiempo a ambos lados de la línea fronteriza.
La República Dominicana y Haití comparten una frontera de más de 300 kilómetros a lo largo de los cuales se disponen diversos puestos con el objetivo de controlar el paso de personas y mercancías y para garantizar la seguridad en la zona fronteriza.