A su vez, criticó que algunos medios de comunicación extranjeros y varias organizaciones “parecen querer conjurar en la República Dominicana miedos de otras épocas y otras latitudes”, algo dijo, que hacen fruto del desconocimiento y de no estar sobre el terreno.
“A pesar de que muchos parecían esperar, no se produjo ninguna catástrofe humanitaria, ni inició ninguna caza de brujas”, manifestó.
Medina, quien negó que vaya a dejar más de 200,000 personas en condición de apátridas, hizo estas afirmaciones durante su intervención en la XLV Cumbre del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) en la citada ciudad colonial, a unos 50 kilómetros al oeste de la capital.
El presidente, quien centró su intervención en la reforma migratoria que lleva a cabo el país, recalcó que el número de casos de apatridia “es cero. Esa es la realidad, y puede ser constatada por los organismos de la ONU” y reconoció que por supuesto, como cualquier Estado, “no somos infalibles”.
Y, agregó, que si alguien presenta caso de apatridia “nuestro gobierno dará la justa solución. Hasta el día de hoy, eso no se ha producido”.
“No vamos a permitir que continúe esta campaña sucia y de descrédito que hace oídos sordos a todas las garantías que hemos establecido para proteger a las personas y se prefiere anunciar una crisis humanitaria inexistente”, recalcó.
Tras indicar que la reforma migratoria es un “éxito que solo fue posible gracias a los valores sobre los que estamos construyendo en República Dominicana”, subrayó que la “realidad es que en este año 2015, tendrán una documentación y los derechos que en el 2013 no tenían”.
“A pesar de que muchos parecían esperar, no se produjo ninguna catástrofe humanitaria, ni inició ninguna caza de brujas”, manifestó.
También recordó que el país “ha sido, durante las últimas décadas, un país de migrantes” y subrayó que la República Dominicana no es ni racista ni xenófoba.
Quienes originalmente plantearon estas cifras tomaron como base los datos de la Encuesta Nacional de Inmigrantes del año 2012, agregó.
Si a Estados Unidos, con sus inmensos recursos, le supone un reto “es lógico que a nosotros nos plantee igual o mucho más que a ellos”, dijo el mandatario, quien recordó que “esta iniciativa buscaba corregir situaciones migratorias de personas que estaban en el país de manera irregular”.
A su vez, reiteró que no habrá deportaciones indiscriminadas o masivas y que algunos medios de comunicación internacionales y organizaciones han repetido la teoría de que más de 200,000 personas habrían quedado en situación de apatridia y estarían en peligro de ser expulsados de República Dominicana.
“Esto es completamente falso. Como no queremos pensar que es una falsedad malintencionada, sino que se trata de un error, vamos a examinar donde tiene su origen”, dijo.
Quienes originalmente plantearon estas cifras tomaron como base los datos de la Encuesta Nacional de Inmigrantes del año 2012, agregó.
Por último, subrayó que “nuestra soberanía no se podrá en cuestión ni porque llegue un turista más ni por un centavo más de inversión”. EFE