La operación parece constituir un clavo más en el ataúd del proceso de distensión entre el Gobierno de Donald Trump y el régimen de Kim Jong-un iniciado justo ahora hace un año. Los responsables de la seguridad y defensa de EEUU han celebrado hoy una reunión para tratar la situación con Irán y con Corea del Norte. Aunque EEUU está mucho más centrado en el primero de esos países, en los últimos días Corea del Norte ha reanudado el lanzamiento de misiles que había suspendido desde hacía más de un año. Trump, que había invertido un considerable capital político en lograr la paz con Corea del Norte, se ha limitado a decir que «nadie está contento con el lanzamiento de misiles» por Pyongyang.
El apresamiento del carguero llega justo un día después de que Estados Unidos anunciara oficialmente que había abandonado las negociaciones con Corea del Norte para la repatriación de los restos de unos 50 militares estadounidenses caídos en la guerra de Corea, entre 1950 y 1953.
En los últimos meses, Trump había prometido en varias ocasiones la repatriación de esos cuerpos, citando incluso el caso de varios padres de soldados fallecidos que, según decían se le había acercado en los mítines de la campaña presidencial de 2016 para pedírselo. Es una afirmación cuestionable, puesto que las medidas de seguridad en los mítines de Trump eran extremas. Y, además, los padres de los soldados que combatieron en Corea tendría, como poco 102 años en 2016, lo que parece indicar que no iba a haber muchos que le pidieran ese favor al candidato. El barco apresado hoy ya fue detenido en Indonesia en 2018 por la misma razón. En aquella ocasión le fueron embargadas 25.500 toneladas de carbón.
Por ahora, no se sabe mucho más de la acción. En 2017, en el momento álgido de las tensiones entre Corea del Norte, por un lado, y EEUU, Corea del Sur, y Japón, por otro, la Armada surcoreana apresó a dos cargueros del Norte -uno de ellos con bandera panameña- a los que acusó de violar el embargo.
Hasta la fecha, el mayor incidente naval entre EEUU y Corea del Norte tuvo lugar hace 41 años, cuando el buque espía estadounidense ‘Pueblo’ fue apresado por Pyongyang cuando estaba en aguas internacionales -según Washington- o norcoreanas -según ese último país-. Los 76 miembros de la tripulación y del equipo de espionaje fueron trasladados a Corea del Norte y torturados durante 11 meses hasta su liberación. El ‘Pueblo’ es a día de hoy un museo en Corea del Norte, y es el único barco de guerra de Estados Unidos que, tras haber sido capturado y nunca fue devuelto a ese país.