En un escrito de reclamación enviado el pasado 28 de julio, la FTC denuncia que el correo electrónico y el número de teléfono, proporcionados por motivos de seguridad por los usuarios de Twitter, se utilizaron para llevar a cabo anuncios dirigidos entre los años 2013 y 2019.
Este uso publicitario, que supone una infracción del acta de la FTC, podría conllevar unas pérdidas a la compañía de entre 150 y 250 millones de dólares, según estimaciones de la propia Twitter recogidas por la FTC.
Aunque este asunto «permanece sin resolver» y no se conoce cuándo se resolverá esta denuncia ni el resulto final, Twitter ha reservado un devengo de 150 millones de dólares para afrontar posibles sanciones.
Twitter está en un momento difícil tras ser hackeado masivamente y descubrirse que un empleado había ayudado a los hackers a acceder a las cuentas de personalidades clave de la economía mundial, desde Elon Musk a Bill Gates, pasando también por figuras políticas como Joe Biden, candidato a la presidencia de los EEUU.