El arma era una escopeta calibre 12, perteneciente a la compañía para la cual laboraba.
Según familiares, El señor Arias García era una persona de perfil bajo y de poco hablar. Su jefe lo califica como una persona responsable y muy trabajador.
De su parte el procurador fiscal de Constanza Lic. Fernando Quezada García, descartó que manos criminales actuaran en el hecho, debido a que las evidencias y los testigos arrojan muy claro que se trato de un suicidio.