Constanza.- Hace algunos días tres familias en el nueve de Arroyo Arriba fueron sorprendidas por un incendio que redujo a cenizas sus viviendas, logrando afectar otras. Desde ese momento para estas personas las calamidades crecieron vertiginosamente.
Pese a que esta situación se hizo conocer por los medios locales, hasta ahora el interés de los políticos no se ha sentido. Solo el alcalde municipal se ha preocupado por estas familias y se ha comprometido con ayudarlos.
Pero como reza un dicho «Siempre habrá una luz al final del túnel», y un grupo de jóvenes estudiantes agrupados en una fundación que ellos ha llamado Sonríe por Amor, se enteraron de la penosa situación de las familias y fueron a llevarles algunas ayudas.
Dicha fundación surge por iniciativa propia y tiene proyectada seguir colaborando con la personas necesitadas.
Aunque son muy jóvenes y su principal propósito es estudiar, no quieren tener influencia política.
Esta acción solidaria y altruista de estos jóvenes pone de manifiesto su compromiso social y la preocupación por los demás. A la vez que envían un mensaje a nuestros políticos, que han olvidado su responsabilidad con el pueblo que los eligió.
