Hace cuatro años el país vibró con un conjunto que no estaba repleto de súperestrellas, pero que estaba armado con las piezas necesarias para vencer sin máculas a sus rivales.
Moisés Alou, gerente general del equipo del Clásico Mundial de Béisbol, colocó al mediodía de este martes la camiseta del equipo al mánager Tony Peña. La suerte está echada, y ahora ambos tendrán que sumar sus capacidades de convocatoria y de dirección para armar otro conjunto ganador para unos ciudadanos que solo conocen el éxito si se gana la corona.